Escribe: Jorge Ancizar cabrera Reyes.-
El pasado 23 de abril, se conmemoró el “Día del Idioma Castellano”, y el gobierno del Presidente de Colombia Alfonso López Pumarejo, que nació en la ciudad de Honda Tolima, expidió el Decreto 707 de abril 23 de 1938 referente a la celebración del Día del Idioma Castellano, siendo Ministro de Educación Nacional José Joaquín Castro M.
Esta es una fecha conmemorativa, con ocasión del fallecimiento del gran escritor español Miguel de Cervantes Saavedra, autor del famoso libro “El Ingenioso Hidalgo don Quijote de la Mancha”. Su muerte ocurrió el 23 de abril de 1616 en la ciudad de Madrid Capital de España.
Dispuso el decreto de López Pumarejo: “En las escuelas normales y en los colegios de enseñanza secundaria que dependan de la Nación se abrirán concursos para premiar el mejor estudio sobre el idioma castellano. Los alumnos vencedores recibirán del Ministerio de Educación Nacional un ejemplar del Quijote, y una Mención honorífica por sus méritos en la propaganda y defensa del idioma patrio…”
Igualmente el Presidente Alfonso López Pumarejo, se posesionó el 7 de agosto de 1934 como timonel de la “revolución en marcha” en una República Liberal que generó cambios profundos en los destinos del desarrollo y progreso del país que las páginas de la historia registra como fuente de viva creación y abrevadero de las generaciones venideras, y las Instituciones creadas en su gobierno siguen vivas irradiando ideas de cambio en el futuro, como producto imperecedero del talento humano como fuerza del pueblo.
López, también sancionó en su segundo gobierno la Ley 5 de 1942 “por la cual se crea el Instituto Caro y Cuervo”, para que se continuara con el “Diccionario de construcción de la Lengua Castellana y la reedición crítica de las disquisiciones filosóficas”, que engalanaron y llenaron de orgullo al país con el premio de las letras “Príncipes de Asturias”.
Miguel de Cervantes “Don Quijote de La Mancha”, exclamó: “Hoy es el día más hermoso de nuestra vida, querido Sancho; los obstáculos más grandes, nuestras propias indecisiones; nuestro enemigo más fuerte, el miedo al poderoso y a nosotros mismos; la cosa más fácil, equivocarnos; la peor derrota, el desaliento; los defectos más peligrosos, la soberbia y el rencor; las sensaciones más gratas, la buena conciencia, el esfuerzo para ser mejores sin ser perfectos, y sobre todo, la disposición para hacer el bien y combatir la injusticia donde quiera que estén”.
Con la caída del Imperio Romano de Occidente, las lenguas romances y el castellano, tuvieron un impulso como lengua literaria de mucha importancia para la cultura y la escritura.
Además, las Naciones Unidas, en la Conferencia reunida en 1995, celebrada en París, estableció con el fin de que los Libros y sus Autores estuvieran al alcance de las personas adultas, jóvenes y niños para aumentar en ellos el disfrute de la lectura, igualmente se le rindió homenaje a los autores, decretando también el 23 de abril como Día Mundial del Libro y del Derecho de Autor.