Escribe: Roberto Trobajo.-
El enemigo de la “izquierda” en Ecuador es Correa y el destructor de los zurdos colombianos es Petro.
Obvio que eso nunca lo reconocerán, al menos de dientes para afuera, esos y esas que ahora andan “explicándoles lo “inexplicable” a sus fans de ese dizque “Pacto Histórico”.
En Ecuador los candidatos alternativos que compitieron en primera vuelta siempre tuvieron muy claro que Arauz –el de Correa– era el que no podía ganar.
¿Razones? El egocéntrico Correa les imponía, pavoneándose de que las soluciones eran las ofrecidas por Arauz ya que defendía su ideario “progresista”.
Al ególatra Correa también le pasaron cuenta por la soberbia impregnada en los mensajes que les mandó a Yaku (del Movimiento Indigena) y Hervas (el de la Izquierda Democrática) acosándoles para que pusieran a votar a sus gentes por Arauz.
Yaku y Hervas no apoyaron a Arauz porque sabían que Correa pretendía utilizarles, máxime sabiendo que cuando fue presidente nunca los tuvo en cuenta.
Si patriota fue Lenin Moreno que siempre ha jugado limpio y aseguró la elección democrática transparente de Lasso, hay que reconocerles méritos por honestidad y gallardía a Yaku y Hervas que no se dejaron sojuzgar ni comprar por el corrupto-oportunista Correa.
Obvio que estas cosas jamás las confesaran los “lideres” mamertos colombianos, ahora afanados por tratar de explicar la derrota de los secuaces que tienen en Ecuador.
Dirán que me estoy inventando razones, montándome una película; ¡me resbala! Estas verdades siempre se supieron en las calles ecuatorianas. ¿Mis fuentes? Los cubanos que viven en el barrio La Florida, en el norte de Quito, famoso porque ahí viven la mayoría de los miles de migrantes que se escaparon del régimen de Cuba y que rehacen vidas en Ecuador.
Ahora Petro y sus cómplices culpan a los indígenas ecuatorianos por no apoyar al candidato de Correa y/o rajan de los seguidores de Hervas porque tampoco apoyaron. Es que el ego de Petro es tan grande como el de Correa, y la soberbia de ese par de “máximos líderes progresistas” tan falsos como una moneda de cuero, les impide ver que en Ecuador no quieren saber de Correa y en Colombia de Petro menos.
La quinta pata al gato que le están buscando a la derrota de Correa allá, es tan innecesaria de buscar como la que perjudicaría a Petro en las próximas elecciones: Correa y Petro son cánceres que han hecho metástasis, y es lógico que esos “alternativos” se cuiden en salud alejándose de ese par de especímenes… mandados a recoger.
Al menos Arauz, el de Correa, logró llegar a la final; porque Petro se quemará en la primera vuelta. Y eso lo saben él, su escudero Bolívar, y toda la jauría de zombis que les rinden culto. De ahí tanto afán en justificar lo que está más que justificado, verborreas que se acrecentarán mutando a pataletas de ahogados cuando con Petro también se les salga el tiro por la culata.
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